No sé si es más peligroso ahora que hace unos 15 o 20 años. Viví mucho tiempo en San Bernardo, y me percaté cómo en poco tiempo la vida de barrio se transformó en algo que le perteneció mucho más a la gente que llegó después a vivir ahí. Nuevos barrios, nuevas necesidades, y de pronto los que estaban viviendo en el casco antiguo sintieron que los barrios cambiaron su función. No tiene que ver con que la vida fue peor. Tan solo diferente a lo que uno estaba acostumbrado.
Entonces te cambias de casa. Dicen los más entendidos que como este es el país del arribismo, nos cambiamos de casa por dos motivos: porque no queremos ser lo que seguiremos siendo donde estamos y porque queremos ser secretamente como los que son en otro lado.
Por motivos que no detallaré, digamos que he vivido en muchas casas y lugares el último tiempo. La mejor lección que saqué de eso es que, sin querer meterte en la vida de nadie, es bueno relacionarte bien con tus vecinos. La vida con los vecinos te permite tener una mejor vida en todo sentido. Pues, a propósito de la identidad que se forma en el barrio, existen de inmediato mejores y más razones para sentirse seguro en un país al que le venden alarmas e inseguridad por todos lados.
Es así como, desde que llegué a mi cuchitril, he tratado de ser lo más empático posible con un repertorio vecinal de lo más variado y diverso.
Y es así como, cuento corto, este verano le estoy cuidando los pájaros a mi vecino de al lado.
Que yo recuerde, nunca tuve canarios, pájaros, loros ni ningún ave de mascota, salvo las gallinas que guardaban mis abuelos en su casa, con las que se proveían de cazuelas y huevos.
Pero todas las noches, mientras la familia de mi vecino está en el sur, llego a regar su jardín y a cambiarle agua y semillas a los 13 pájaros que subsisten, pues murió uno hace unos días, asunto que me dejó en completa desolación. No es que les tenga cariño a estas alturas, pero sí, cuando los visitas a diario, y los ves reaccionar por ser un simple proveedor de semillas y agua fresca, te acercas a ellos necesariamente.
Cuando mi vecino se fue con su familia, uno de los canarios tenía 4 crías. A los dos días de hacerme cargo salieron del nido. Al quinto día una de esas crías yacía entre los fierros de la jaula aplastado inmisericordiosamente por sus hermanos y padres. El más débil. Me acordé que por estos días se cumplieron 200 años del natalicio de Darwin.
Pongo más atención al salir al patio de mi casa todas las mañanas, colindante con la enorme jaula que mi propio vecino les construyó. Los escucho cantar bulliciosamente. Me quedo tranquilo.
Mañana llega mi vecino supuestamente y sé que me relevan de una tarea que podré suplir leyendo o haciéndome cargo de mis propios asuntos. No, aún no quiero comprarme una jaula ni heredar un canario. Pero atender a estos 13 me hizo sentir más parte del barrio.
19 comentarios:
El vecino es más parte de la cultura de provincias... lo digo por experiencia propia, porque soy de la sexta y ahora vivo en santiasco... El ritmo de vida, los horarios de trabajo, las eternas colas, el estres, el uso indiscriminado del departamento limita de gran manera el generar comunidades integradas... fomenta la soledad, el individualismo... pero a su vez, la desconfianza, el miedo y la desproteccion... Comparto contigo... no hay mejor sistema de seguridad que unos buenos vecinos... el tema es darse el tiempo y que el otro también esté dispuesto a lo mismo...
Saludos del Kiltroenllamas
Te las mandaste Patricio wn...
No se porqué pero me llegó tu columna, no se si será porque la estoy leyendo después del marketead San Valentín o quzá porque soy parte de esas"comunidades", que como bien dicen KiltroenLlamas, aún quedan en provincias...
Desde Iquique y para el mundo digo que es algo totalmente distinto llegar a un barrio de aquellos allá por principios de los 90's a lo que se han vuelto ahora. Acá están tratando de erradicarlos, y fui parte de esa maniobra del gobierno regional, y claro que se merma el ethos del barrio y sobre todo cuando comienza a llegar gente foránea...eso, junto con la droga -que acá si que se vive y fuerte- han hecho de esa satisfacción y prgullo barrial, el móvil de partida de muchos amigos, que como bien dices, no quieren repetir viejos atavios.
Respecto de los vecinos, tiene ud. toda la razón, no hay mejor estrategia de seguridad que armar "sociedad" con los vecinos, además que siembra el bienestar de vivir tranquilo con quienes te rodean y esa fragancia de paz y armonía que logras y sientes al saludar a tu vecino a la vuelta dela pega, en la entrada de tu casa, es algo que se siente bien en el alma.
No me extiendo más, saludos Don Pato, y cómprese unos canarios, según mi sabia abuela, ellos traen paz a la vida...
ps: "Es lo que hay" por lejos, lo mejor.
Estoy de acuerdo con Kiltroenllamas, la vida de barrio es muy de provincia... y demonios que se hecha de menos... viví 22 años en casas con el negocio de la esquina y la vieja "parlante" sapeando en la ventana, con la sede social multifuncional y con esos funerales en que la junta de vecinos hace una colecta y lleva una corona al difunto... esos barrios donde al vecino junto con saludarlo le tiras una talla bien pesada, porque ya son como parte de la familia.
Por motivos de mi profesion, me tuve que venir a santiasco... y lo unico que encontré, fue un condomimio donde los vecinos estan mas preocupados de que el "barrio" sea mas lindo... lo mas parecido a alguna pelicula gringa posible... pero nadie se preocupa por compartir. Los tiempos cambian...
Saludos don pato
Don Pato: Concuerdo con usted y con los otros contertulios.
Yo soy de Coyhaique, asi que se puede imaginar la vida de vecinos en una ciudad tan chica y alejada, donde ahi si que todos nos conocíamos en la cuadra, con el negocio de la esquina, un taller mecánico que hacía ruido todo el día, las señoras metiches, etcétera.
Ahora vivimos en Valdivia, y el cambio se nota de inmediato, apenas saludando a los vecinos de las casa todas iguales (si es que cada casa tenia su propia onda, y eso hacía diferente al barrio también).
Saludos desde estos barrios, Don Pato.
Estoy muy de acuerdo con Kiltroenllamas en que el mejor sistema de seguridad son unos buenos vecinos... Pero viéndolo mucho más allá de eso, resulta tremendamente agradable saber que aun cuando te venden miedo e inseguridad por todos lados, tener la confianza en que aun existen personas que sin ser parte de tu vida intima, son parte de tu entorno diario, y personas en que puedes confiar.
Saludos Pato, y ojalá que no se muera otro canario antes de que llegue el vecino!!
Y pensaba que en Santiago no pasaban estas cosas (?).... La vidad de barrio se da así y existe mayor contacto en las provincias... como varios han publicado.
a mi me encanta la vida de barrio, que el señor del almacen(don juan) te diga como esta vecino, cuanto pan llevara hoy, Poder salir a caminar tarde, comprar el diario en la esquina son cosas impagables con el ritmo de vida actual.- Son cosas que no vivia antes.- Vivo en edificio, pero de muy pocos dptos lo que hace que conozcas a la mayoria de tus vecinos, vecinos que ademas estan dispuestos a ayudarte en cualquier momento.- Y yo vivo en Santiago, donde aun se puede hacer vida de barrio.
Jajaja...yo podría escribir una historia que se llame "Los Gatos"
Hoola don Patricio de la gran Baticueva!
Que quiere que le diga, eso es tener "cueva" literalmente pues, jeje. Ese vecino que tiene vale oro, porque encontrar gente honrada en esta inmensa urbe es como pillar una aguja en un pajar.
Le confiaron a Ud. quizás el más valioso tesoro que esa familia posee: sus queridos pajaritos.
No creo que lo vayan a querer linchar porque se le fué un ave cortada, quizás ya estaba enferma de antes o se atragantó tomando agua
...vaya uno a saber.
Ahora dicen que Darwin tomó "prestada" la teoría de la evolución a otro científico, además la idea estaba rondando desde mucho antes, faltaba que la dijera una figura de peso para que ésta finalmente fuera aceptada.
Muchos aún creen en la generación espontánea o que la vida tiene un origen divino. Recién ahora el Vaticano acepta, ante el peso de la evidencia, que la selección natural es compatible con la fe.
Hay también selección natural cuando se llega a vivir a un barrio de casas recién construidas, ahí todos estarán en igualdad de condiciones y nadie mirará al vecino con cara de haberse encontrado un bicho raro.
Por el contrario la vida en departamento es de la puerta hacia adentro, ideal para quienes buscan independencia, sobre todo en matrimonios jóvenes.
Otro ejemplo de in-volución se da en la comuna de Ñuñoa que antes se caracterizaba por conservar barrios muy antiguos, ideal para las grandes familias "a la antigua" (donde se vivía con los abuelos bajo un mismo techo). Pero este esquema se rompió con la irrupción de torres de 30 pisos, en el mismo espacio de 1 o 2 casas con patios gigantes donde estaba el parrón en la entrada de auto y varios árboles frutales en el patio. Hoy se construye mucho depto de 1 o 2 ambientes, donde ocurre de todo en su interior. La violencia intrafamiliar va en aumento como consecuencia del aislamiento de la gente con su entorno.
Habría que estar loco para confiarle las llaves al vecino de departamento, lo primero que hará es asaltar el refrigerador, ver todos los DVD en la cama, dejar platos sucios en la cocina, ponerse la ropa de uno e incluso usar el desodorante y la pasta de dientes.
Lamentablemente hoy en día la confianza está mal entendida, recuerde que la ocasión hace al ladrón. Cuidado Don Pato!
Que esté bien.
es verdad eso de que uno se siente ligado a las mascotas cuando se vuelve su proveedor... Odiaba los pájaros hasta cuando mamá se casó y el tipo en cuestión llegó como con ochenta canarios, como veinte catas, como veinte diamantes y doce inseparables... VUELVETE LOCA!
Pero aún así... io no le cuido las mascotas a nadie!!! Las plantitas si, a quién sea... y eso de prender luces y abrir ventanas... jaijaiajiajaij... Con las awelitas son más sociable, con los de mi edad, bien pueden irse a la cresta :O
Pegaré un cartel sobre el símbolo de ADT que diga "IO LE CUIDO LA CASA A MIS VECINOS"... jaiajiajiajaij
No solo queda en provincias... a mi también me ha tocado hacerme cargo del perro de mi vecino,(no que mi vecino sea un perro jajja), y regar su jardín.
Antes de sus vaciones me ha dicho "señorita Trini, le echa una miraita a mi casa"... pero es cierto, los niveles de confianza han decaido notoriamente, aun cuando hay mas "elementos" para comunicarnos, estamos más lejos de ello.
Querido Pato, como siempre, un gusto leerte.
Don Pa:
Muy lindo su relato.
Vivo en una pobla desde que tengo memoria, y lo único que quiero es salir de aquí por distintos motivos.
Pero si hay algo que valoro es que aquí, siendo pobre, habiendo tenido papás cesantes, enfermos y sin ni uno, nunca pasé hambre, porque siempre tuve vecinos que vienen a golpear la puerta de tu casa para saber si tienes almuerzo, y así mismo para pedirte "una tacita de azúcar" cosa pintoresca para muchos, una verdad para mi. Mis bastas siempre me las hizo mi vecina, mi segunda mamá, los cortes de pelo e inyecciones se encarga mi viejita linda en toda esta manzana. Y así, todos nos salvamos poco a poco como antes era costumbre en todas partes.
Un abrazo estimado.
Se le lee en ambas partes.
Los vecinos, esos que de alguna manera se transforman en amigos, el destino se encarga de ponerlos en frente de uno, en provincia la cosa se hace mas cercana, te saludan pa tu cumple, te van a dar el abrazo de año nuevo, sus hijos juegan con los tuyos y en oportunidades te cuidan a los cabros chicos, cuando no pudiste encontrar a la niñera, para que puedas salir a pagar algo o q se yo. cuando uno se cambia de casa no llegay haciendo vida social pero, derrepente tienes buena onda con ellos y se forma el grupo de los buenos vecinos.
Cuando eres pequeño, los vecinos forman parte normal en tu vida, en mi caso veia cuando llegaba del colegio a la agueli chela (vecina desde que tengo uso de razón) regando o de vueltas de las compras y cuando cerró sus ojitos para siempre, la lloré como si fuera parte de mi familia.
Hola estimado... Que importante es la vida "vecinal" no?.
El otro dia caminaba con mi hermano por las "callecitas de Buenos Aires" haciendo unos tramites por el fallecimiento de mi viejo, yo soy Argentino pero vivo en Chile hace años ya. Y en determinado momento observe que una plaza de buen tamaño se encontraba cercada por una reja de 1.50 metros, de puntiagudos barrotes y puerta vigilada... Mi hermano de 20 años la vio y ni siquiera se inmuto... a mi en cambio me choco la vision de ese espacio de libertad absolutamente ausente de ella. Nos fuimos reflexionando juntos y la conclucion fue que esa reja..., esa fortaleza metalica... era el verdadero triunfo de la delincuencia y el amarillismo de los medios, por sobre la ciudadania y peor aun por sobre la democracia..., o acaso existe un lugar mas diverso y democratico que una plaza?, donde uno puede llegar a la hora que sea y hacer casi lo que desee... Es un espacio que se tenia y se perdio por que ya no interesa quien es tu vecino, o que le pasa o cuanto hijos tiene..., el individualismo nos ha abasallado de tal forma que creemos que estamos solos en la ciudad y que solo nosotros y los nuestros importan y nadie mas...
Si queremos ganarle la batalla a la delincuencia y a la inseguridad tenemos que estar unidos..., "la union hace la fuerza", y esa es una buena forma de ayudar...
Atte.
Gabriel Garcia A.
El tema de los pajaros en una excusa para tocar el tema del ser vecino y parte de un vecindario. En lo personal tengo 25 años y ya debo haber vivido en mas de 30 casas entre mi papa y mama qeu son separados, lo qeu pasa es que mi mama no aguanta mucho en un mismo logar siempre dice que seria feliz en una casa rodante,el tema es que por este motivo tengo qeu tener la capacidad de relacionarme rapidamente con los vecinos lo cual al principio lograba pero la verdad ya me da mucha lata, ya no comparto con nadie del vecindario pero qeu se que el timepo no me dara para conocerlos, por el contrario mi mama increiblemente de casa casa se va con un parde amigas, las cuales visita a menudo, es impactante su capacidad de relacionarse y crear lazon de confianza, ojala algun dia yo lo logre tambien.
Pez*
¡¡¡¡Que buenas historias han contado, muchachos!!!!
Yo le riego el frontis de la casa a mis vecinos de al lado, a pito de nada en realidad, no me pidieron que lo hiciera, pero lo creí necesario, puede que ellos nunca se enteren.
Tenía catas cuando chico, pero tengo un trauma con eso.... al principio eran 2, y les trajimos una "amiguita" a cada uno para que se procrearan.... y lo hicieron. Pero un día se nos quedo abierta la jaula, y quedó solo una parejita. La que murió de la forma más cruel posible: de hambre. Ese es mi trauma, nunca más quise tener pajaritos.
saludos pato!!!
Echele una miradita a mi blog si quiere.
La verdad/ yo no soy muy sociable/con las personas que me rodean/no es que sea gruñona/por el estilo. Si no porque me tocan vecinos mas complicados que plato de tallerines.
A mi vecina del lado/le moslesta hasta que vuele una mosca/ni hablar el ruido que ella genera. El otro día un vecino de la siguiente casa tenía un cumpleaños/no llevaba ni una hora/de dicha celebración/cuando ella llamó a los carabineros/cuento corto/se acabó el cumple....Mala onda la Sra.
Soy de llevarme mejor con los vecinos mas lejanos/esos que debes caminar cuatro casas más allá. Lejos prefiero hacerme cargo del jardín/plantas/pero mascotas no.
Soy alergica a ellas(bueno también algunas plantas).
Hoy en esta sociedad/ya no existe la misma confianza que años atrás. Donde todos estamos preocupados de generar ingresos/ y la vida en comunidad ha pasado a segundo plano.
Si bien yo soy de provincia/no en todos los sectores se da ese ambiente.
Saludos/Villarrisences!
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